Memorias de una dama y esos ricos que me lloran

Escribo este post en estado de shock emotivo-profesional. Está claro que cuando se repartieron las dosis de talento, Dios debió considerarme muy poca cosa. Eso o pretende hacerme millonaria por alguna otra vía. Pero lo realmente bochornoso es intentar escribir en un blog sobre literatura cuando me cuesta un berrinche Seguir leyendo